15/3/18

Engaños en la web II: clickbait y dark UX

En el anterior artículo de esta serie, hablábamos del phishing, que suponía un acto de suplantación de un servicio web o de una persona. Este fraude constituye en muchos casos un delito. No obstante, hay engaños en la web que no son delitos o no son tan fácilmente castigables. Se trata de engaños menores, aunque pueden tener repercusiones también sobre el dinero de los usuarios.

En primer lugar, el fenómeno de clickbait consiste en atraer a un usuario a una web con el objetivo de que la visite y, así, subir las estadísticas y, por tanto, el dinero que reciben a través de la publicidad. Clickbait, de clic y cebo (bait) normalmente es un engaño poco comprometedor, destinado a engrosar los beneficios por publicidad, las descargas de una app o el aumento de seguidores en una red social. Si bien el cebo también lleva al usuario a páginas o programas con malware, por lo que tener un antivirus actualizado y ser cauteloso con qué enlaces clicamos es una buena defensa.

Por otro lado, un fenómeno relacionado pero distinto es el conocido como dark UX. Este anglicismo significa literalmente «experiencia de usuario oscura». Es habitual encontrarlo en procesos de compra largos o con muchas opciones. De acuerdo con El País Retina (2018), ejemplos de patrones interfaces de usuario oscuros son los seguros de viajes, los pagos a terceros y las suscripciones a servicios online.

Ratonera
Fuente: Pexels
En realidad, en algún punto de la web están enterradas las explicaciones del proceso, a sabiendas de que los usuarios rara vez leemos este tipo de información. Aprovechan la costumbre y cansancio del usuario de no revisar los detalles de la compra para introducir subrepticiamente estos conceptos. Estos procesos son relativamente conocidos en aerolíneas y servicios de viajes low cost pero, de acuerdo la compañía de diseño UIE (2017), es algo cometido también por grandes empresas como Microsoft, LinkedIn o Facebook. A favor de Facebook hay que decir que, como respuesta a las quejas, hizo más accesibles sus configuraciones sobre privacidad, las cuales se encontraban antes parcialmente ocultas bajo un patrón oscuro.

Es importante resaltar que estos patrones oscuros son una decisión de diseño. UIE pone sobre la mesa que, a la hora de crear una página o servicio web, ciertos diseñadores deciden que una casilla vendrá por defecto marcada (para que al usuario se le olvide desmarcarla) o por defecto incluirán al usuario en un boletín de noticias y promociones publicitarias. Ponen al usuario en una posición de desventaja a la hora de decidir pormenorizadamente qué artículos desea comprar, a qué servicios suscribirse o darse de baja. Todo ello normalmente para responder a las demandas de alcanzar unos objetivos o unas determinadas métricas.

En estos casos, la solución más accesible es revisar varias veces todo antes de realizar una compra y ponernos en contacto con los administradores de la página web si tenemos dudas antes y/o después de la compra.

Referencias:

Este artículo forma parte de la serie Engaños en la web, que comprende dos artículos Phishing y Clickbait y dark UX.



1 comments:

rafaelega dijo...

Gracias, muy interesante

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